Ricino (Aceite)

El aceite de Ricino es muy beneficioso en general en el cuidado de  las pieles secas, dañada, con grietas y las pieles irritadas y sensibles ya que previene la sequedad de la piel ayudando  a mantener la humedad en la epidermis. Muy usado para las manchas marrones o infecciones cutáneas, tales como el acné o las infecciones fúngicas. Los ácidos grasos de triglicéridos presentes en el aceite, tal como el ácido ricinoléico, son bien conocidos por su acción antimicrobiana, esto hace que sea de gran alcance contra las infecciones de la piel tales como eccema, dermatitis y erupciones en la piel. Incluso las personas que sufren de inflamación de la piel, irritación y picazón generalmente se les recomienda aplicar un poco de aceite sobre la piel para aliviar el malestar.
Muy beneficiosos en cabellos desvitalizados, secos y apagados con  puntas rotas, dañadas y abiertas y la caída del cabello en general. El aceite de ricino tiene propiedades germicidas, insecticidas y fungicidas, de modo que es un tratamiento natural muy común para tratar problemas en el cuero cabelludo que causan la pérdida del cabello. Este producto contiene ácidos grasos que nutren e hidratan el cuero cabelludo y el cabello. Como crema hidratante, el aceite de ricino penetra el tallo piloso del cabello para humectarlo, al mismo tiempo que lo sella para evitar que la humedad no se escape. Usar aceite de ricino como humectante de manera regular mejora la apariencia del cabello seco y ayuda a contrarrestar el daño debido a los tratamientos químicos. Añadido a un acondicionador contrarresta los efectos negativos de los tintes, el sol y la sal del mar.  También aumenta el brillo.
Para las uñas rotas, blandas o dobladas y el cuidado general de las pestañas. El aceite de ricino, gracias a los ácidos grasos oleico, linoleico y palmítico, tiene la capacidad de suavizar y dar brillo a las pestañas, al mismo tiempo que evita que se vuelvan finas y poco visibles y, además, consigue que las cejas se vean más marcadas y bellas, así como también evitar que se debiliten. El aceite de ricino, gracias a su contenido en vitamina E, es capaz de fortalecer a las uñas consiguiendo que se muestren fuertes y evitando que se quiebren fácilmente