La harina de avena está
especialmente indicada en pieles
sensibles por sus propiedades pero no sólo estas pieles se ven beneficiadas por
ella, también está recomendada en todo tipo de piel incluso en las que son reactivas a las cremas, en las que sufren de dermatitis atópica y para
la sensible piel de los bebes. La avena es el limpiador
natural efectivo para la piel y que respeta por completo la dermis. Absorbe y elimina la suciedad y las
impurezas, limpia profundamente los poros e hidrata y suaviza nuestra dermis. Es uno de los cereales con
mayor contenido de grasas: 65% de grasas no saturadas y 35% de ácido linoléico,
esto le confieren propiedades hidratantes y suavizantes para el uso en
cosmética. Además, contiene vitaminas del complejo B, oligoelementos,
betaglucanos y derivados fenólicos, denominados aventramidas, que poseen
importantes cualidades anti-inflamatorias. Debido al fósforo que contiene,
disminuye la dureza del agua, lo que se traduce en una acción suavizante y
relajante. Al estar compuesta de lípidos
y substancias absorbentes de agua, evita la deshidratación de la piel y
mantiene una barrera protectora frente a las agresiones externas. Calma las irritaciones de la
piel tanto de origen alérgico como de otra causa, así como el picor o escozor.
Recomendada en pieles con eccemas o psoriasis. Excelente producto para utilizar
en tu baño y para lavar tu rostro cada mañana ya que posee efecto
anti-envejecimiento y lifting.
